Los grandes SUV de lujo presumen de sobradas capacidadedes para salir de asfalto y vivir para contarlo. Por ello en nuestra comparativa 4×4 de hoy enfrentamos a tres SUV que además de tecnología, lujo y mucho confort, también prometen no temer el off-road. Posiblemente ninguno de sus clientes se atreva jamás a sacarlos del asfalto, pero hoy en Diariomotor vamos a comprobar cuál de estos tres SUV es el mejor para hacer 4×4. Porsche Cayenne, Mercedes GLE o Volkswagen Touareg, ¿Cuál es tu ganador?
Los 3 aspirantes de nuestra comparativa de hoy se caracterizan por ser recetas modernas de conceptos con varias generaciones a sus espaldas. Todos nacieron con la fiebre del SUV de lujo, coches que aún escondían un espíritu todoterreno bastante protagonista, pero que con el tiempo han ido adaptando sus caracteres a lo que demanda y necesita el mercado. En definitiva, coches con cada vez mejor comportamiento en carretera, aunque ello suponga abandonar – en teoría – sus antaño notables cualidades todoterreno.
Pero obviamente no todo es negativo, y es que esta evolución hacia el concepto más urbano del SUV también ha traido consigo importantes mejoras. Para empezar nos encontramos unos niveles de confort y refinamiento muy superiores a sus primeras generaciones, algo que se agradece mucho sobre asfalto, aunque también lejos de él. Pero a mayores, si hay algo que merece la pena destacar es el perfeccionamiento de la electrónica, una suerte de ayudas que nos permiten gestionar y controlar el avance por cualquier superficie sin que los pasajeros se percaten de ese arduo trabajo. Y esa es precísamente la batalla que hoy se juega aquí, encontrando un Volkswagen Touareg que lo confía todo a la electrónica, frente a un Porsche Cayenne que saca a relucir el trabajo de sus diferenciales bloqueables y un todavía más capaz Mercedes GLE que añade reductora, suspensión independiente neumática y el carácter más todoterreno.
El Porsche Cayenne que empleamos en esta comparativa es la versión E-Hybrid con motor V6 híbrido enchufable de 462 CV y 700 Nm de par. Hablamos de uno de los SUV de referencia cuando se trata de prestaciones y circulación por asfalto, pero no hay que olvidar que el Cayenne siempre ha presumido de grandes cualidades off-road y por ello en Diariomotor no queríamos dejar pasar la oportunidad de llevarlo al límite. Los puntos fuertes del Cayenne están en un elevado par motor, una tracción total con diferenciales central y trasero bloqueables (automáticos), suspensión neumática con altura regulable y una electrónica donde encontramos un modo off-road con diferentes perfiles de conducción en función del terreno por el que circulamos. Y qué es lo que tenemos en contra, pues una altura libre al suelo que se queda en 245 mm en su cota máxima, un recorrido de suspensiones bastante reducido y la ausencia de una reductora que nos permita avanzar con mucha fuerza y control a muy baja velocidad.
Nuestro segundo candidato es el Volkswagen Touareg, un coche que es posiblemente el mejor ejemplo de esa reconversión hacia el concepto más SUV, y es que en esta última generación nos encontramos con su visión más familiar, confortable, lujosa y tecnológica. En el caso concreto de nuestra unidad de pruebas se trata del motor 4.0 V8 TDI de 422 CV y 900 Nm, convirtiéndose así en el tope de gama del modelo. Los puntos fuertes del Cayenne están en su electrónica, destacando un modo de conducción «Experto» que ofrece un control bastante eficaz de cada rueda según ésta pierde adherencia. A ello añadimos una suspensión neumática capaz de llevar la altura libre al suelo hasta los 260 mm, contando además con un mayor recorrido de suspensiones que nos permite mantenernos por más tiempo con las 4 ruedas en contacto con el suelo. En contra nos encontramos esa gran apuesta por la electrónica, no encontrando ni diferenciales bloqueables, ni reductora, aunque sí con 900 Nm que deberían ayudarnos a no echar en falta esa relación más corta.
Y para terminar esta batalla nos encontramos con el Mercedes GLE, la versión más moderna de aquellos Mercedes ML, y que hemos probado en su variante gasolina microhíbrida GLE 450. Hablamos de un coche cuyo propulsor es un 6 cilindros en línea con 367 CV y 500 Nm, destacando en él su apuesta por el carácter más todoterreno de esta comparativa al instalar el paquete off-road. A favor de este Mercedes nos encontramos por tanto una suspensión independiente neumática capaz de alcanzar los 285 mm de altura libre al suelo, con un enorme recorrido de cada rueda, reductora y un control de tracción realmente eficaz. Por contra, este Mercedes GLE es el que menos par motor ofrece y tampoco cuenta con bloqueos manuales para sus diferenciales.
En definitiva, hoy enfrentamos 3 conceptos de SUV muy diferentes, y que además abordan la conducción todoterreno de maneras muy dispares. Pero la teoría es una cosa, y la práctica otra muy distinta, especialmente aplicando nuestras reglas 4×4 donde es la tracción, y no la inercia, la que marca las diferencias a la hora de superar un obstáculo. Sobre el papel podría parecer más o menos fácil encontrar un ganador entres nuestros contricantes, pero en nuestro circuito 4×4 Raid Aventura es habitual encontrarnos con sorpresas, y esta comparativa no ha sido diferente demostrando que hay que olvidarse de los prejuicios.
Volkswagen Touareg 
