En el último Salón de Ginebra, celebrado hace casi un año, se presentó el Mini Rocketman. Además de una canción de Sir Elton John, el Rocketman era un prototipo de un Mini que volvía a sus orígenes. El actual Mini mide casi 3,80 metros y el Rocketman aspiraba a volver a sus raíces puramente urbanas, con una longitud de sólamente 3,42 metros. Una estética cuidada y un aspecto simpático le ganaron a crítica y público.
Mini demostró sus intenciones de construirlo a finales del pasado año, no hace siquiera un mes. Unas pocas semanas después acabamos de conocer que Mini se ha echado atrás. El Mini Rocketman se queda en un simple prototipo. Una verdadera pena, ya que de haberse lanzado podría haber supuesto una alternativa muy interesante a otros urbanos asequibles con toques premium, concretamente al smart fortwo y al Fiat 500. ¿Por qué ha ocurrido esto?
Según CAR Magazine ha sabido, el problema ha estribado en su desarrollo. Mini no pudo adaptar ninguna de sus plataformas disponibles. Lanzar el Mini Rocketman habría supuesto el desarrollo de una nueva plataforma con una batalla muy corta y poco espacio para estructuras deformables de protección en caso de accidente. En definitiva, unos costes demasiado altos en relación a la rentabilidad esperada.
Conocido internamente como el Mini Mini o el Mini City, habría supuesto un retorno a los valores originales de Mini, que francamente – y siendo técnicos – distan de modelos como el Countryman, por muy exitoso que sea.
Fuente: CAR
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