El presidente de la IMSA, John Doonan, comunicó que para el venidero Gran Premio de Detroit se realizarán ajustes manuales en el Balance de Rendimiento, con énfasis en la clase GTP, en vista de lo que ha estado ocurriendo en lo que va de campeonato. Hasta ahora, en cuatro fechas disputadas, el resultado ha sido el mismo: pole para el BMW M Hybrid V8 y victoria para el Porsche 963. Por tal razón, el comité técnico que rige el campeonato optó por no aplicar exclusivamente el sistema de promedio móvil que se basa en datos porque la tendencia que se observa en pista no corresponde con lo que indica la teoría.
Por tal razón, a partir de Detroit tanto el Porsche 963 como el BMW M Hybrid V8 tendrán un aumento de peso mínimo y reducción en la potencia que entrega el motor, al primero se le sumarán 11 kilos y al segundo 2, en tanto con el Acura ARX-06 y el Cadillac V-Series.R se hará lo contrario. El prototipo de General Motors tendrá un descargo de 29 kilos mientras el proveniente de Honda bajará 22 kilos. En lo que se refiere a la potencia, el Acura podrá desarrollar 28 caballos adicionales y el Cadillac 15, con respecto al rendimiento que ambos prototipos mostraron en Laguna Seca. Por su parte, a BMW se le restarán 36 caballos de potencia y a Porsche 7. Con estas medidas la organización espera una mayor paridad en pista, de cara a los tres eventos que faltan por disputar de la Copa de Resistencia.
En lo que respecta al Aston Martin Valkyrie, al ser su primer año en el campeonato, el prototipo experimentará los cambios más ligeros, se mantiene su peso mínimo en 1030 kg y su potencia apenas se elevará en 1,3 caballos en la primera etapa de la carrera y 2,9 en la segunda. Al ser Detroit un circuito callejero y trabado, la nueva asignación de potencia no tendrá tanta relevancia como el peso, de allí que se espere un mayor dinamismo a la hora de disputar la pole. Es obvio también que al llegar a Detroit, sede de General Motors, los representantes de la IMSA no quieren observar al Cadillac Serie VR rezagado en la clase GTP. Añadió Doonan que el criterio para la aplicación del BoP se aprobó únicamente para Detroit y una vez se aprecien los resultados se analizará si se continúa utilizando más adelante.
Por otra parte, en la clase GTD se realizaron ajustes a siete coches, siendo el más favorecido el Lamborhini Huracán que descargará 20 kilos, mientras al Ferrari 296 GT3 se le restará un aproximado de 8% en la potencia declarada en la primera etapa.
En palabras de John Doonan:
Quieres hacer lo correcto y ajustes basados en un proceso, pero cuando las cosas divergen un poco en términos de competencia, es decir tienes un par de coches encima de la banda de rendimiento y un par de coches por debajo, quieres unir a todos. El que quiera ver una competencia emocionante necesita lo que estamos intentando hacer aquí, tanto en GTP como en GTD [Pro], de cara a Detroit.
Vía IMSA