El Porsche 911 GT3 R Hybrid competirá próximamente (15 y 16 de Mayo) en las 24 Horas de Nürburgring 2010, pero este 911 híbrido ya ha estado rodando en el viejo Nordschleife. Hace tan sólo unos días Nico Hulkenberg, campeón de la pasada temporada de la GP2 y actual piloto de Williams F1, ha pilotado el 911 GT3 R híbrido durante unas cuantas vueltas en una demostración, con el con el fin de probar el sistema híbrido.
Esta colaboración no es en absoluto casual, puesto que Williams F1 ha desarrollado y construido el sistema híbrido para este modelo de Porsche, siendo muy similar al KERS que muchos equipos de la Fórmula 1 usaron en el 2009. Quizás en el futuro esta labor de ingeniería por parte de Williams le pueda reportar interesantes beneficios para una escudería privada bastante necesitada de ingresos.
El sistema híbrido del Porsche 911 GT3 R Hybrid es, por tanto, un poco peculiar. Cuenta con dos motores eléctricos de 82 CV que transfieren la potencia a las ruedas delanteras durante un intervalo de tiempo puntual, mientras que el tradicional motor de combustión boxer de 6 cilindros y 480 CV deriva toda su potencia a las ruedas traseras.
Al contrario que en los híbridos que ruedan por las carreteras, aquí el protagonismo no recae sobre las baterías eléctricas, ya que los motores eléctricos del 911 GT3 R reciben energía de un KERS (sistema de recuperación de energía en la frenada) como el de la Fórmula 1, consistente en un volante de inercia ubicado en el habitáculo que hace las veces de generador de energía. Según Williams, esta solución es más interesante para su uso en competición debido a que puede almacenar grandes cantidades de energía y transferirlas más rápidamente. En palabras del propio Hulkenberg,
Gran coche, con tecnología fascinante y una pista absolutamente incomparable. Este circuito es único, no se puede comparar a ningún otro más en el mundo. Ciertamente, no será la última vez que conduzca aquí. Sorprendentemente, en las curvas lentas el 911 no está muy lejos un coche de Fórmula 1. El agarre mecánico es impresionante.
Con este KERS, se consigue un interesante aumento de potencia de unos 164 CV durante un periodo de 6-8 segundos, al pulsar el botón correspondiente en el volante. Aunque también se anuncia una reducción de consumo, algo muy importante para una carrera de resistencia, no creo que en este caso sea un factor primordial, pero desde luego la potencia extra disponible parece nada despreciable.
Un nuevo camino en competición que se abre para Porsche, y todo ello sin necesidad de traicionar la tradición, porque esto simplemente supone un pequeño plus para el rendimiento y, quién sabe si también en el futuro, un paso adelante hacia una deportividad más sostenible. Al menos no nos han quitado el gusto de escuchar el imponente sonido del motor bóxer rodando por las curvas míticas del Norschleife, como veréis en el siguiente vídeo:
Vía: Skiddmark
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