El preparador de culto de Opel ha presentado su peculiar visión de la nueva generación familiar del Opel Astra, el Astra Sports Tourer. Tal y como nos tienen acostumbrados, los cambios se limitan a unos cuantos retoques estéticos y ligerísimos cambios mecánicos, pero nada de potenciaciones en el motor. Por tanto, se podrá montar en cualquier versión del modelo.
La moda actual casi obliga a presentar un coche en color blanco, así que Irmscher no iba a ser menos. En esta tonalidad nos encontramos una carrocería maquillada por un frontal que presenta nuevas rejillas en forma de panal de abeja y un parachoques delantero ligeramente modificado. También se han añadido faldones laterales y un discreto alerón sobre el cristal trasero.
La preparación incluye un nuevo diseño de llantas que le sientan bastante bien al conjunto, disponibles en tamaños de 18 o 20 pulgadas (medida que se ve en la imagen). Aparte de estos cambios estéticos, la única novedad es la sustitución de la suspensión por otra más deportivo que además rebaja la altura libre del coche en 30 mm.
Aprovechando la ocasión, tengo que decir que las carrocerías familiares de Opel son las que más atractivas me resultan actualmente. La línea marcada por el Insignia Sports Tourer ha sido continuada de forma inteligente en este Opel Astra Sports Tourer, que en su zaga ofrece una imagen mucho más deportiva de lo esperado en este tipo de carrocerías, generalmente vistas como aburridas en España.
Precisamente hace unos meses vimos la preparación de Irmscher sobre el Insignia Sports Tourer, mucho más agresiva y llamativa que la de hoy. Personalmente me quedo con la del Astra, ya que no veo a un familiar como un coche para llamar la atención. Unos simples retoques estéticos y una mejora del comportamiento es suficiente para decir que tu coche es diferente a los demás pero sin caer en estridencias.
Vía: CarScoop
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