La diversión todoterreno del Porsche 911 Dakar 2023 no es barata: sólo el paquete Rally, que es opcional, tiene un coste de 30.000 euros… y el modelo, en sí, arranca en 256.042 euros. Para aquellos que sueñan con un deportivo preparado para salirse del asfalto y no se pueden permitir semejante capricho, existe una opción mucho más asequible: este Mazda MX-5 NA de 1992, que cuesta mucho menos.
Las transformaciones de este tipo comenzaron como simples modificaciones que los equipos hacían a sus coches para que pudieran sobrevivir al Rally Safari durante los años 70 y 80. Por ello, las modificaciones originales estaban protagonizadas por modelos relativamente humildes como el Volkswagen Beetle que ganó en 1953 o el Datsun 240Z que se llevó el triunfo en 1973 cuando la cita fue incluida en el Campeonato Mundial de Rally como prueba puntuable.
El espíritu del Rally Safari
Para poder mantener aquella tradición habría que hacer que las adaptaciones fueran un poco más asequibles que el nuevo Porsche 911 Dakar. No obstante, existen ejemplos aquel espíritu como este Mazda MX-5 NA con un acabado en ‘Classic Red’ y techo rígido extraíble.
Lo cierto es que la versión rally del Miata no es demasiado sutil: lo que más llama la atención es su altura libre al suelo, que han logrado con un kit de (elevadas) suspensiones que está acompañado de unos amortiguadores ajustables firmados por Tokico. Con esta combinación han hecho hueco suficiente para que quepan los neumáticos todoterreno de 27 pulgadas, que van montados sobre unas llantas de acero Bassett de 14 pulgadas pintadas de negro.
El resto de elementos que contribuyen a la transformación están al mismo nivel. En el frontal reconocemos las formas características del Mazda MX-5 NA como los faros escamoteables que, eso sí, en esta ocasión son de LED. Sin embargo, la atención es para la enorme barra de protección delantera y para el juego de luces auxiliares montadas sobre el techo. Un detalle que recuerda a los modelos del Rally Safari: también contaban con este equipamiento para poder detectar a los animales que se podían encontrar a lo largo de la ruta por Kenia.
Un V8 bajo el capó
Bajo el capó no hay rastro alguno del motor de Mazda: ha sido sustituido por un V8 302ci de Ford que aumenta considerablemente la potencia original del MX-5. Está asociado a una transmisión manual de cinco velocidades y cuenta, también, con un diferencial trasero del fabricante estadounidense.
En el interior quedan, también, resquicios del Mazda MX-5 NA original… aunque también han hecho algunos cambios: el volante, la palanca del cambio y la barra antivuelco ‘Hard Dog’, evidentemente, no estaban ahí cuando el biplaza fue fabricado.
Un precio asequible
El origen de esta particular versión del Miata hay que buscarlo en Ohio, donde residía su primer dueño: después pasó un tiempo en Kansas y Nebraska antes de que su actual dueño lo adquiriera en julio de 2019. El odómetro muestra poco más de 215.652 kilómetros, de los cuales unos 1.600 se han recorrido en los últimos tres años. Disponible en la plataforma ‘Bring a trailer’, está disponible por 8.500 dólares (8.200 euros, según el cambio actual).
Mazda MX-5 
