El grupo Volkswagen tiene entre manos un serio problema con el software de sus coches, algo que de hecho ha supuesto el cese de su anterior CEO Herbert Diess en favor de Oliver Blume y el retraso de nuevos lanzamientos en muchas de sus marcas. Pero bajo la nueva dirección, Volkswagen ha entonado el mea culpa y ha prometido solucionar los problemas de sus sistemas multimedia, y ojo porque no solo hablan de software, sino también de hardware. De este modo, todos los propietarios actuales – y futuros – de coches afectados por los fallos del sistema de infoentretenimiento MIB3, están de enhorabuena.
En una reciente entrevista concedida al medio británico Car Magazine, el nuevo CEO de la marca Volkswagen Thomas Schäfer ha admitido los problemas del sistema de infoentretenimiento MIB3. Este sistema fue presentado como una de las principales novedades de las plataformas modulares MQB EVO y MEB, siendo estrenado por coches como el Volkswagen Golf de octava generación (el actual), el ID.3, el SEAT León MK4, el CUPRA Formentor o el Skoda Octavia MK4, ofreciendo en todos ellos un salto sin precedentes en tanto a gráficos, rendimiento, conectividad, etc.
El problema es que este sistema, desde antes de llegar al mercado, ya evidenciaba problemas que provocaron incluso el retraso en el lanzamiento del propio Golf. Aún así, una vez llegó al mercado, siguió mostrando fallos que provocaban problemas en su gobierno, pérdida de rendimiento o desactivación de funciones. Con el paso del tiempo, Volkswagen ha lanzado varias actualizaciones de software para el sistema MIB3 mejorando la experiencia en todos los coches del grupo que lo instalan, sin embargo aún quedan cosas por pulir.
Y es por ello por lo que Schäfer ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a sus clientes. El nuevo CEO de Volkswagen ha prometido el lanzamiento de un nuevo software 3.0 que permitirá solucionar los problemas y añadirá nuevas funciones a la interfaz MIB3 en el invierno de 2022. Pero además, ha confirmado que en 2023-2024 veremos llegar una revisión del sistema MIB3 a nivel de hardware para solucionar uno de sus grandes defectos, la falta de retroiluminación en el panel táctil inferior con el que gobernamos la temperatura y el volumen en este sistema. A esta mejora se añadirá también una revisión en el diseño de los volantes y sus mandos multinfunción, algo con lo que se pretende conseguir un control más intuitivo que el que hoy por hoy ofrecen los botones táctiles, botones que en Diariomotor hemos criticado hasta la saciedad, tanto en Volkswagen como en todas las marcas que se han sumado a esta moda.
En Volkswagen dicen haber escuchado las críticas realizadas por sus clientes, talleres y periodistas, motivo por el cual han decidido tomar cartas en el asunto. Del mismo modo, para prevenir que este tipo de fallos vuelvan a llegar a la producción en serie, también se ha revisado el programa de desarrollo y pruebas previo al lanzamiento de un modelo. De esta forma se pretende conseguir un test mucho más crítico, con personal ajeno a la marca y de diferentes edades, que permita detectar fallos o posibles mejoras.
Volkswagen Golf 
