En la división GTD de las 24 Horas de Daytona participarán 27 de los más exóticos supercars del mercado, todo un deleite para el público observar a los Audi R8 LMS, Aston Martin Vantage, Ferrari 488, Lamborghini Huracán, Porsche 911, BMW M6 y los recién incorporados Acura NSX, Lexus RCF y Mercedes AMG, todos coches cuyos precios superan las seis cifras en dólares. Para destacar que los fabricantes están involucrados con programas oficiales, lo que indica que la IMSA ha proporcionado nuevos aires a los GT3 y el resultado es más que satisfactorio.
La adición de Acura, Lexus y Mercedes Benz otorga mayor nivel a la división, la más atractiva y competida entre todas ya que el reglamento concede equilibrio, a pesar de la diversidad de configuraciones de tan fascinantes máquinas. También resulta de lo más interesante advertir lo que pueden progresar los coches clientes con respecto a los oficiales, particularidad que solo se puede distinguir en tal división. Además es una delicia para los espectadores escuchar en vivo el paso del grupo ya que se pueden distinguir el sonido característico de los V10 de Audi y Lamborghini, el V8 Aston Martin y Lexus, el Porsche Boxer 6 cilindros, el V6 Twin turbo Acura y los V8 twin turbo BMW, Mercedes y Ferrari.
Michael Shank, quien hará debutar los Acura NSX en su equipo, manifestó que ir a correr a Daytona con coches nuevos es un gran desafío porque la división es tan compleja que las décimas de segundo representan grandes diferencias. Por tal razón, para ganar necesitan mejorar el equilibrio del chasis y enfocarse en los pequeños detalles ya que al ser los coches tan igualados, el talento de los pilotos y las paradas en los pits serán ventajas determinantes.
Si has hecho el mejor trabajo posible fuera del coche, el último lugar para evaluar estaría dentro de la cabina porque cuando se agite la bandera verde todo queda en manos de nuestros pilotos, ellos deben tomar las mejores decisiones porque todos los coches están muy igualados.
Vía | Racer
