Motor Trend ha tenido la consideración de enfrentar por nosotros a dos de los coches japoneses más potentes que existen actualmente: el Lexus LFA y el Nissan GT-R. Muchas son las diferencias entre ambos corredores de pista pero también hay paridad en otros aspectos, como que han conseguido que deseemos con todas nuestras fuerzas poder sentarnos alguna vez tras su volante.
El mini documental comienza con un análisis de las cualidades del Lexus LF-A comentando desde su poderoso motor V10 hasta su concepción ligera, con su abundante cargamento de fibra de carbono y aluminio, hasta lo delicadamente cuidado que está el exterior aunque a la hora de enfrentar en carrera a estos titanes diría que no tiene demasiada importancia.
Los datos técnicos aclaran quién es el ganador a priori tanto por potencia como por peso y, sin embargo, en cifras netas de velocidad máxima y cronómetro en aceleración no parece estar todo tan decidido:
Lexus LFA
- Motor 4.8 V10 de 560 CV a 8.700 rpm, 480 Nm de par máximo a 6.800 rpm.
- Transmisión a las ruedas traseras, cambio manual robotizado de seis marchas
- De 0 a 100 km/h en 3.7 segundos
- 325 km/h de velocidad punta
- Peso en vacío: 1.480 kg
- 48 % del peso en el eje delantero, 52 % en el eje trasero
- 0.31 cX de coeficiente aerodinámico
Nissan GT-R
- Motor 3.8 V6 Biturbo de 486 CV a 6.400 rpm, 588 Nm de par máximo entre 3.200 y 5.200 rpm
- Transmisión a las cuatro ruedas, cambio automático de seis velocidad
- De 0 a 100 km/h en 3.5 segundos
- 315 km/h de velocidad punta
- Peso en vacío: 1.815 kg
- 53 % del peso en el eje delantero, 47 % en el eje trasero
- 0.27 cX de coeficiente aerodinámico
Llega el momento de poner al Lexus LFA y al Nissan GT-R en el canal de drag para intentar demostrar cuál es el que se lleva el trofeo. Os recomiendo ver el vídeo antes de seguir leyendo.
El final del vídeo revela paso por paso lo que ha ocurrido en este pequeña competición. Como afirma MotorTrend la superior tracción del GT-R le hace adelantarse al LFA en el primer momento pero posteriormente el motor del Lexus es capaz de aportar más fuerza y la diferencia de peso resulta crucial para que el LFA se capaz de separarse del morro del GT-R y llegar a meta victorioso.
Quien, afortunado por su bolsillo, se esté pensando elegir entre estos dos cochazos japoneses no debería dejarse llevar por una simple carrera. El Nissan GT-R ha demostrado en muchas pruebas (contra el BMW M3, el Veyron o el Porsche 911 Turbo) que es un deportivo en toda regla aunque a ver quién es el listo que se resiste a tener en su garaje un coche con el LFA con el que uno es capaz de “vibrar” con solamente escuchar su motor.
Vía: autoblog.it
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