Que el éxito de los SUV ha provocado el adiós de modelos muy apreciados por el público es algo sobradamente conocido, sin embargo no es menos cierto que en algunas ocasiones también han sido los culpables de que ciertas marcas y modelos hayan podido seguir fabricándose. Una de estos casos positivos está a punto de repetirse, una noticia muy esperada por muchos fans, pues gracias al éxito de los SUV podría resucitar la mejor alternativa al BMW Serie 3.
Son muchas las veces que se ha hablado de modelos que tienen como objetivo ser la mejor alternativa al BMW Serie 3. Rivales hay muchos como bien pueden ser modelos como el Audi A4, el Mercedes Clase C, el Jaguar XE o el Alfa Romeo Giulia, sin embargo sólo estos dos últimos consiguen plantar cara al Serie 3 en cuanto a filosofía, aunque no en todos los aspectos.
Es por ello por lo que cuando Mazda presentó sus planes de reinventar el Mazda 6, haciéndolo además sobre la nueva plataforma diseñada para usar motores de 6 cilindros en línea y configuración de propulsión, rápidamente se planteó un proyecto que verdaderamente podría convertirse en ese mejor anti-BMW Serie 3. Pues a una base que se presentaba ya más que interesante, se unía el buen hacer de la firma japonesa a la hora de poner a punto sus coches, tanto en materia de conducción, como en acabados interiores.
Pero si bien el Mazda 6 comenzó su desarrollo a partir de esta fórmula, no tardó demasiado en ser congelado en favor de la nueva oleada SUV de la marca. Las ventas estaban, y están, en las carrocerías de tipo SUV, motivo por el cual Mazda reestructuró su ofensiva de productos para centrarse única y exclusivamente en este tipo de modelos, dando así luz verde a la creación de 4 modelos SUV a partir de esta nueva plataforma: CX-60 y CX-80 para Europa y CX-70 y CX-90 para Estados Unidos.
Pasado el tiempo, y ya con los CX-60 y CX-90 en el mercado, Mazda está consiguiendo un notable éxito de ventas, lo que habría animado al fabricante a recuperar el proyecto de revivir el Mazda 6. Esta berlina partiría del tren de propulsión empleado por el CX-60, lo que permitiría disfrutar de motores diésel y gasolina de 6 cilindros en línea con tecnología microhíbrida, además de un motor híbrido enchufable de hasta 326 CV. Su diseño seguiría los pasos del precioso Mazda Vision Coupé Concept de 2017, apostando por una carrocería de cuatro puertas y silueta deportiva, aunque tendríamos que esperar hasta al menos 2025 para ver en las calles a esta nueva berlina, quedando aún la duda de si Mazda se atrevería a vender este nuevo 6 en mercados como el europeo.
Fuente: BestCar
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