El Peugeot 308 es un compacto, del segmento C, fabricado por Peugeot desde 2008. Actualmente se comercializa la tercera generación, presentada en 2021. El Peugeot 308 se caracteriza por contar con un diseño muy personal, atlético y atrevido, junto con un interior que pretende rivalizar con modelos premium. Se fabrica en la planta de Poissy (Francia).
Entre los coches compactos que aspiran a rivalizar con el Peugeot 308 se encuentran contendientes de su clase de todo tipo, con modelos como el Volkswagen Golf, el Ford Focus y el SEAT León.
Diseño exterior del Peugeot 308
El Peugeot 308 ofrece un diseño de claros tintes deportivos, muy en la línea con los últimos lanzamiento de la marca, pero además también integra un lenguaje deportivo, agresivo y muy personal. Este cambio de filosofía, junto con una mejora en su calidad de construcción, pretenden crear un coche con un notable éxito en el mercado. A nivel estético es la firma lumínica de sus ópticas el punto más destacable, especialmente en el caso de los faros LED delanteros que cuentan con un diseño en general muy agresivo.
La carrocería, en general, aparece «tensionada» a ojos del espectador gracias a la profusa aparición de líneas en la chapa, que marcan diferentes pliegues y curvas en los paneles verticales de la carrocería. El Peugeot 308 ha sido el encargado de estrenar la nueva imagen de marca, con un logo mucho más grande, encuadrado dentro de una especie de rombo, que aparece tanto en el frontal como en la trasera y, dependiendo del acabado, también en las aletas delanteras. El compacto francés mide 4,37 metros de longitud, 1,85 de ancho y 1,48 de alto.
Gama mecánica del Peugeot 308
El Peugeot 308 cuenta con motores MHEV, PHEV y EV, pero se olvida de las opciones diésel. El primero de ellos combina el ya conocido 1.2 PureTech de tres cilindros y sobrealimentado por turbo con un sistema mild-hybrid. De esta forma, el compacto francés desarrolla 145 CV y cuenta con la etiqueta ECO.
La opción híbrida enchufable recurre a un motor de cuatro cilindros y 1.6 litros que, junto a un propulsor eléctrico, desarrolla una potencia total de 195 CV. Todo ello se complementa con una batería de 14,6 kWh de capacidad con la que declara una autonomía de 86 km en modo eléctrico.
Y por último nos encontramos con el 308 eléctrico. Tan solo está disponible con una sola mecánica de 156 CV y 270 Nm de par que está alimentada por una batería de 55,4 kWh de capacidad neta con la que declara 450 km de autonomía y que admite cargas de 100 kW.
Diseño interior del Peugeot 308
A nivel de diseño interior el Peugeot 308 ofrece una línea atractiva y elegante, con un claro enfoque premium. Se aprecia también un carácter deportivo que se ve acentuado en detalles como el peculiar diseño de su puesto de conducción con la arquitectura i-Cockpit donde el cuadro de instrumentos -de 10 pulgadas- está ubicado en una posición superior a la habitual -siendo digital- y el volante cuenta con un diámetro inferior de lo normal.
Esta disposición se complementa con una pantalla táctil de 10 pulgadas y con un panel con accesos directos que son, además, personalizables. En lo que a maletero se refiere, el Peugeot 308 declara 412 litros en la versión MHEV, 314 litros en la PHEV y 361 litros en la eléctrica.
Conducción del Peugeot 308
En Diariomotor hemos tenido la oportunidad de probar el Peugeot 308 tanto en versión compacta como familiar (308 SW). Nuestras impresiones sobre este modelo se pueden resumir como muy satisfactorias al encontrarnos con un coche que mejora en calidad, tecnología, equipamiento y propulsores a su antecesor. La apuesta por un diseño mucho más agresivo y personal puede no encajar a todos, pero supone un punto de diferenciación y distinción que le hacen destacar frente a sus principales rivales.
Durante esta primera toma de contacto pusimos a prueba diferentes propulsores y acabados, constatando que la dinámica de conducción es uno de los puntos fuertes del 308. Es un coche que sigue primando las sensaciones al volante, algo que consigue con un chasis muy bien puesto a punto, un comportamiento ágil y una dirección rápida. Eso sí, el diseño de su puesto de conducción «i-cockpit» requiere de cierto periodo de adaptación para acostumbrarnos a la posición de algunos mandos y al peculiar diseño del volante.
